Los proyectos de comisariado de arte contemporáneo comprenden un área de investigación, teorización, práctica artística y aplicación a la esfera pública de enorme importancia para el desarrollo de muy distintas áreas del conocimiento en la era contemporánea. El comisario, en mi caso, el historiador del arte especializado en comisariado en arte contemporáneo por la Universitat de València, la Universidad de Murcia y la Universitat Politècnica de València, es la figura sobre la que se vertebra todo este volcado de conocimiento, que, de manera holística, enriquece a muy distintas disciplinas. El proyecto de comisariado supone un avance para el desarrollo y aplicación de las disciplinas humanísitcas, pero también para ejercer la crítica al método científico, formando parte de él, claro, pero generando inquietud y ansia de conocimiento desde el seno del mismo método. No se trata de una crítica unilateral al mismo, sino una reflexión sobre sus límites, ampliándolos, en todo caso. Pues el conocimiento connotativo aporta al positivismo la parte humana que aquél requiere para adaptarse mejor a una realidad post estructural en la cual el valor de la diferencia y de las distintas opiniones genera el mismo método, insuflándole vida. Vida respetuosa, vida reflexiva, vida reproductiva, entendido el término como una continuación de los sistemas productivos modernos en aplicación post estructural del pensamiento, yuxtapuesta a una aplicación post productiva del sistema predominante de la economía global, en la que cada gesto es localizado y adquiere importancia en una cadena de consumo infinita. Las posibilidades de generación de conocimiento que ofrece el proyecto de comisariado son, también, infinitas, o, al menos, y tal como afirma el teórico del arte Paul Ardenne, como mínimo, ilimitadas. Los 3 proyectos de comisariado en arte reciente español desarrollados en este escrito aportan mucho conocimiento, generan incertidumbre y apuestan por la diversidad. Son consecuencia de un proceso que comienza mucho antes de que la obra de arte haya sido concebida, pero contienen en su esencia procesos análogos que la hacen posible. Tienen muy en cuenta el concepto de proceso como algo que nunca está acabado del todo, y en el que la posibilidad de generar todo tipo de relaciones, con ámbitos del conocimiento muy distintos incluso, es su sello de originalidad y su garantía de cara al incierto futuro generado en el mismo seno de la institución “universidad". Que la institución sostenga y homologue procesos de generación de conocimiento como el tipo de proyectos que en este escrito se defienden supone un avance científico indudable, pero al mismo tiempo concretiza la opinión de Jürgen Habermas de que el proyecto de la Modernidad como proceso de emancipación individual y colectiva aun no está cerrado, y que quedan aun temas por resolver y poner en relación. Los 3 proyectos de comisariado puestos en relación aquí aportan una nueva especialidad del pensamiento contemporáneo.

Contemporary art curation projects comprise an area of ​​research, theorizing, artistic practice and application to the public sphere of enormous importance for the development of very different areas of knowledge in the contemporary era. The curator, in my case, the art historian specialized in curating contemporary art by the University of Valencia, the University of Murcia and the Polytechnic University of Valencia, is the figure on which all this knowledge dump is based, which, holistically, it enriches very different disciplines. The curatorial project represents an advance for the development and application of humanistic disciplines, but also for exercising criticism of the scientific method, forming part of it, of course, but generating concern and a desire for knowledge from within the same method. It is not a one-sided criticism of it, but a reflection on its limits, expanding them, in any case. Well, connotative knowledge contributes to positivism the human part that it requires to better adapt to a poststructural reality in which the value of difference and different opinions generates the same method, breathing life into it. Respectful life, reflective life, reproductive life, understood the term as a continuation of modern productive systems in post-structural application of thought, juxtaposed to a post-productive application of the predominant system of the global economy, in which each gesture is localized and acquires importance in an infinite chain of consumption. The possibilities for generating knowledge offered by the curatorial project are also infinite, or, at least, and as the art theorist Paul Ardenne affirms, at least unlimited. The 3 curatorial projects in recent Spanish art developed in this writing provide a lot of knowledge, generate uncertainty and are committed to diversity. They are the consequence of a process that begins long before the work of art has been conceived, but they contain in their essence analogous processes that make it possible. They put into the game the concept of the process as something that is never completely finished, and in which the possibility of generating all kinds of relationships, with even very different fields of knowledge, is their seal of originality and their guarantee in the face of uncertainty. The future generated within the institution “university.” That the institution sustains and homologizes knowledge generation processes such as the type of projects that are defended in this writing is an undoubted scientific advance, but at the same time concretizes the opinion of Jürgen Habermas that the project of Modernity as a process of individual and collective emancipation is not yet closed, and that there are still issues to be resolved and put in relationship.The 3 curatorial projects listed here contribute a new specialty of contemporary thought.