La colegialidad es un concepto muy antiguo y se utiliza para identificar una cualidad característica de la unión entre las personas que trabajan para identificar esa coordinación y la idea de colaboración a nivel de trabajo conjunto para un fin u objetivo común. Esta idea necesitaba una mayor profundización y especificación de los detalles que componen esta significación ya que queda en un discurso muy difuso y para realizar la evaluación del concepto necesitamos especificar sus componentes. El trabajo educativo por competencias, es el trabajo que más fuerza adquiere en los últimos años en el sistema educativos de España, según Jornet J. y otros (2010) “es un proceso que debe estar evaluado y diseñado a partir de trabajos colegiados. El procedimiento para conformar los elementos que se implican en la definición del juicio de valor, que involucra cualquier evaluación, deben sustentarse en el consenso intersubjetivo. La calidad del aprendizaje, el nivel de logro de cualquier competencia, necesariamente se apoya en apreciaciones subjetivas, por lo que su objetivación requiere de un trabajo colegiado de equipos de especialistas en currículum, investigación educativa, y/o docentes. Según se trate de evaluaciones de competencias abordadas desde un centro educativo o para un propósito más general (como por ejemplo, la evaluación de sistemas, los comités de desarrollo de estándares tendrán una composición con mayor presencia de unos u otros colectivos”. En el contexto actual de la educación, se plantea la necesidad de una mayor coordinación del profesorado en los centros escolares, con el fin de mejorar su eficacia y responder a las demandas educativas que recaen sobre ellos. Compartir las metas de la enseñanza constituye, de forma especial una de las condiciones que influyen en la profundidad con la que el profesorado colabora prestándose entre sí consejo y apoyo, esta existencia o no de consenso alrededor de los fines educativos es muy importante ya que repercute en los resultados generales tanto a nivel del profesorado como del alumnado en los centros. La creencia generalizada de que la gestión horizontal y una estructura descentralizada de la autoridad tienen el potencial para promover la eficacia en la escuela. Sin embargo, la literatura indica una discrepancia entre la conceptualización y definición de colegialidad y la evidencia empírica. Por este motivo, la delimitación o definición del constructo “colegialidad docente” es un elemento fundamental para poder abordar el diseño del modelo de análisis de la dimensión educativa de la cohesión social. Por considerarlo como parte de un modelo, debemos realizar el esfuerzo, y el riesgo, de asumir una definición de partida que nos permita posteriormente diseñar instrumentos para su evaluación.

In 2007 the European Ministers of Higher Education said in the London Communiqué that: "Higher education should play a strong role in fostering social cohesion, reducing inequalities and raising the level of know ledge, skills and competences in society”. According to the aim of contributing to the social dimension of the European Higher Education, the MAVACO project in w hich the present study is part, has been designed. Our model focuses on the definition of an Assesment Model for Social Cohesion (SC) (Jornet, 2010). In SC Assessment Model, Teacher Collegiality is defined as a factor that can stimulate educational improvement and offer a more coherent educational model for students. Currently, few European educational centers are characterized by collaborative w ork environment and high level of collegiality among teachers (García Llamas, 2005; Fernandez Tilve and Malvar, 1999). Based on previous research, there is not a common definition for Teacher Collegiality and there is a need to design a reliable instrument. Thus, the objective of this study is to validate the definition of Teacher Collegiality dimension and design an instrument to assess it. We consider that Teacher Collegiality identifies the quality of union betw een individuals w ho w ork in a coordinated and collaborative w ay to accomplish a common goal or objective in educational settings. From this perspective, Teacher Collegiality dimension is built from three different concepts: members’ satisfaction w ith w hat they receive from the institution, members’ w illingness to contribute the benefit of the other colleagues, and the organizational climate as a reflection of the school culture. In this w ay, w e identified three sub-dimensions as part of Teacher Collegiality. The first sub-dimension is related to job satisfaction scale by Cetina, Aguilar and Ortega (2011), reducing the scale to those elements that may be relevant in the perception of satisfaction in a school. For the second sub-dimension, organizational commitment scale w as adapted from González Such, Sánchez Delgado and Jornet (2011), scale that offers criteria like ganizational, social and ethical commitment in the school. The organizational climate scale w as adapted from Vasquez and Guadarrama (2001).